"Creemos que falta trasparencia en la agenda pública del Gobierno sanitario de la Comunidad de Madrid para el desempeño y ejercicio de la responsabilidad política", aseguró Oteo durante la comisión de estudio de los diferentes sistemas de gestión que se celebra en la Asamblea de Madrid.
El compareciente indicó que "en la creencia infundada de que el mercado privado resuelve mejor determinados problemas de la sanidad pública madrileña, se ha excluido literal y clamorosamente a la propia tecnoestructura de la Consejería de Salud y a sus recursos humanos y técnicos de su legítima función pública de contribuir como agentes activos a la creación de valor sanitario, generando entre los propios profesionales y técnicos desmotivación, confusionismo y desubicación en su necesaria y relevante actividad pública competente".
"Da la impresión de que la autoridad sanitaria de nuestra comunidad no cree en el sector público, y sin embargo, paradójicamente, tiene que gobernarlo y rendir cuentas a la sociedad", defendió Oteo, quien apuntó que "las dificultades en conseguir un presupuesto suficiente y equilibrado en términos agregados, está dando fuerza al frenesí privatizador del Gobierno de la Comunidad de Madrid, que trata de justificar y sustentar sus decisiones políticas en la carencia de recursos propios".
Así, dijo no entender "la deriva compulsiva hacia el mercado y la privatización de los activos y competencias públicas esenciales a través de diferentes modalidades de externalización radical está produciendo unos efectos sanitaria y socialmente inaceptables e indeseables", entre las que citó la "fragmentación de competencias públicas esencial", la "ruptura de los ciclos de innovación tecnológica en el sector público", o la desintegración de las funciones esenciales de la cadena de valor y soporte asistencial".
Asimismo, apuntó que la "marcada ineficiencia" en la política de inversión de activos de activos e infraestructuras públicas a través del modelo PFI ha demostrado en la experiencia internacional que el modelo "es económica y socialmente inapropiado".
En la misma línea, señaló que la "externalización masiva de servicios especializados puede afectar de forma irreversible al modelo de trabajo en las comunidades y microsistemas clínicos".'