'Ha pasado tiempo desde la llegada de Esperanza Aguirre a la Presidencia del Gobierno de la Comunidad de Madrid y del inicio del proceso de desmantelamiento de la Sanidad Pública madrileña al hilo de la privatización progresiva realizada en estos años; ciertamente su política no debiera haber producido ninguna sorpresa, pues sus programas electorales dejaban claras sus intenciones.
No obstante lo anterior, se produjo un preocupante silencio desde diversos colectivos y organizaciones que debieron haber denunciado entonces con contundencia, ante la opinión pública, las graves consecuencias que para el sistema sanitario público madrileño tenían esas políticas. Quienes en aquellos días defendieron con protestas y movilizaciones a la Sanidad Pública de las agresiones reiteradas, como consecuencia de la política sanitaria del Gobierno del Partido Popular, no encontraron el suficiente apoyo para lograr paralizar esa nefasta política.
Daño irreversible
Hoy, el daño producido a la Sanidad Pública madrileña es ya irreversible: el caos organizativo, creado intencionadamente para producir la total desregulación de los flujos asistenciales con el colofón final de la instauración del Área Única, el abandono por parte del Gobierno Regional de la Atención Primaria, incumpliendo sus promesas de construcción de los Centros de Salud necesarios y el mantenimiento de unas plantillas escasas, la situación precaria en recursos humanos y materiales de los hospitales tradicionales, los graves errores en la puesta en marcha de los nuevos, junto a las graves restricciones en los futuros Presupuestos como consecuencia de la insostenible situación financiera creada por la monumental deuda generada por una política despilfarradora e irresponsable, dibujan un incierto futuro para el Sistema Sanitario Madrileño.
Unidad de acción
Algunos han tomado conciencia ahora del desastre producido; más vale tarde que nunca. Por ello, sin perjuicio de seguir denunciando por todos los medios posibles la política sanitaria del Gobierno del Partido Popular, ha llegado el momento de una acción potente y masiva contra esa política; es el momento de la unidad de acción en la oposición al proceso privatizador.
Dejando al margen las diferencias, favoreciendo puntos de encuentro, es necesario hoy plantar cara al Gobierno Aguirre. Por ello se hace necesario apoyar toda manifestación o movilización que se convoque con una presencia masiva de todos aquellos que decimos defender los Servicios Públicos. Así sea'
Fuente: Carlos Barra en Punto de Vista de Acta Sanitaria 18/11/09
No obstante lo anterior, se produjo un preocupante silencio desde diversos colectivos y organizaciones que debieron haber denunciado entonces con contundencia, ante la opinión pública, las graves consecuencias que para el sistema sanitario público madrileño tenían esas políticas. Quienes en aquellos días defendieron con protestas y movilizaciones a la Sanidad Pública de las agresiones reiteradas, como consecuencia de la política sanitaria del Gobierno del Partido Popular, no encontraron el suficiente apoyo para lograr paralizar esa nefasta política.
Daño irreversible
Hoy, el daño producido a la Sanidad Pública madrileña es ya irreversible: el caos organizativo, creado intencionadamente para producir la total desregulación de los flujos asistenciales con el colofón final de la instauración del Área Única, el abandono por parte del Gobierno Regional de la Atención Primaria, incumpliendo sus promesas de construcción de los Centros de Salud necesarios y el mantenimiento de unas plantillas escasas, la situación precaria en recursos humanos y materiales de los hospitales tradicionales, los graves errores en la puesta en marcha de los nuevos, junto a las graves restricciones en los futuros Presupuestos como consecuencia de la insostenible situación financiera creada por la monumental deuda generada por una política despilfarradora e irresponsable, dibujan un incierto futuro para el Sistema Sanitario Madrileño.
Unidad de acción
Algunos han tomado conciencia ahora del desastre producido; más vale tarde que nunca. Por ello, sin perjuicio de seguir denunciando por todos los medios posibles la política sanitaria del Gobierno del Partido Popular, ha llegado el momento de una acción potente y masiva contra esa política; es el momento de la unidad de acción en la oposición al proceso privatizador.
Dejando al margen las diferencias, favoreciendo puntos de encuentro, es necesario hoy plantar cara al Gobierno Aguirre. Por ello se hace necesario apoyar toda manifestación o movilización que se convoque con una presencia masiva de todos aquellos que decimos defender los Servicios Públicos. Así sea'
Fuente: Carlos Barra en Punto de Vista de Acta Sanitaria 18/11/09
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