'No seré yo quien me posicione en contra de los grandes proyectos corporativos. Soy un convencido de las múltiples ventajas que nos aportan. Ventajas que, por pura costumbre, a veces damos por supuestas y las interiorizamos de tal forma que sólo nos acordamos de los problemas y los defectos.
Mientras ejercía mi actividad clínica, era un fanático del proyecto corporativo andaluz,' [...]
'Después llegué a mi actual hospital, pero había una gran diferencia… el hospital contaba desde hacía años con un sistema de información hospitalario (HIS) propio que se había ido adaptando a las necesidades de sus profesionales. Durante mis primeros meses allí, seguía con mi defensa a ultranza del proyecto corporativo,' [...]
'Me empecé a dar cuenta de que el proyecto corporativo no cubría todas las necesidades' [...]
'Llegué a la conclusión de que el “café para tod@s” no era, en absoluto, una opción válida. Si un servicio de un hospital tiene una necesidad concreta o es el único que realiza determinada técnica (por poner un par de ejemplos rápidos) y el sistema corporativo no le da cobertura, tenemos la obligación de dársela. Si no, estaremos promoviendo los sistemas departamentales y, por tanto, los silos (o islas) de información.
Es cierto que un servicio central de informática no tendría tal capacidad de desarrollo y también es cierto que muchos servicios centrales le tienen un miedo incomprensible para mi al desarrollo no centralizado de aplicaciones… pero yo pienso, ¿por qué? En nuestros centros tenemos profesionales capacitados de sobra para desarrollar y tenemos a l@s expert@s clínic@s que saben lo que necesitan… ¿por qué no dejarlos trabajar juntos? No hay que prohibir el desarrollo no centralizado, simplemente hay que regularlo y tenerlo bajo control (no desde el punto de vista dictatorial y restrictivo, sino desde el punto de vista de saber qué se tiene, no duplicar esfuerzos y encontrar sinergias).
Por mucho que prohibamos, no vamos a conseguir evitar nada y podemos perder mucho por el camino.
Por todo esto, mi actual actitud hacia los grandes proyectos corporativos es que sean flexibles y abiertos a las particularidades de los componentes de la organización. ¿Por qué todo centralizado y en una misma base de datos central si podemos integrar? Teniendo resuelta la identificación unívoca de l@s ciudadan@s, ¿qué problema habría en que el sistema corporativo “preguntara” a mi sistema hospitalario por una persona concreta? Técnicamente, ninguno o pocos y solucionables… es más una cuestión de política (esa que siempre lo nubla todo) y cultura de la organización. Si se nos permitiera eso… mañana mismo seríamos parte de la historia única.
Fuente y opinión completa: El Cuaderno de Bitácora de Fran Sánchez Laguna 27/11/2010