Lo que FEMYTS ha explicado a Grupos Parlamentarios que deben debatir y aprobar el proyecto de Ley elaborado por el Gobierno de Esperanza Aguirre es que el proyecto de área única, presentado como una mejora en la gestión centralizada y de los recursos humanos, no va a dar respuesta a los problemas planteados en la sanidad pública madrileña (burocratización, rigidez del sistema, concentración de poder en la toma de decisiones, masificación, falta de inversión, falta de planificación en objetivos de salud, etc.), más bien alejará la toma de decisiones del centro de trabajo, dificultando la participación y la coordinación del ejercicio profesional de los médicos.
Asimismo, añadieron, representa una ruptura de la continuidad asistencial, y hará aún más difícil la coordinación entre niveles asistenciales con un área de más de 6.400.000 habitantes.'
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