'Si algo ha dañado enormemente a los trabajadores
temporales del SERMAS en los últimos años, han sido los sistemas de
selección temporal sistemáticamente se han utilizado por este Organismo,
para disponer de una mano de obra de “usar y tirar”, fomentando un
miedo generalizado entre los trabajadores más precarios (sustitución,
eventuales, etc.) ante el temor a ser despedidos o no renovados. Todo
ello por estar sometidos de forma permanente, a unos sistemas de
evaluación y control totalmente discrecionales.
En este sentido han tenido gran influencia los Acuerdos de bolsas de contratación firmados por la Administración y la mayoría de los sindicatos a partir de 2005, pero también los Pactos anteriores, donde se regulaba por cada centro la contratación temporal, permitiendo en algunos casos la exclusión de la bolsa por motivos totalmente arbitrarios (decisión unilateral de un jefe, discrepancias con la forma de realizar la actividad, caer en situación de incapacidad temporal o simplemente no estar a la altura del rendimiento deseado sin especificar motivo alguno). De esta manera el trabajador ha sido sometido a una presión permanente que obstaculiza enormemente su actividad profesional.
Ya no digamos nada de los centros donde ni siquiera han existido bolsas de contratación, permitiendo a los responsables de la selección de los trabajadores, actuar con total arbitrariedad en la incorporación de los mismos (amiguismo, clientelismo u otros procedimientos subjetivos).
Pero aún incluso en los sistemas de selección más regulados la Administración se mueve en un auténtico caos (bolsas centralizadas para algunas categorías, bolsas preferentes para otras procedentes de procesos selectivos, bolsas para funcionarios, para laborales, etc.).
Tratando de remediar este caos en Febrero de 2016 se firmó por la Administración y los Sindicatos de la Mesa Sectorial un Acuerdo de selección temporal, que debería estar ya en funcionamiento desde Octubre, pero una vez más, ni Administración ni sindicatos han cumplido con sus compromisos.
Todo esto puede tener una explicación como casi siempre siniestra. Tras el anuncio hecho por la Mesa Sectorial de convertir entre Noviembre y Diciembre a 5.000 trabajadores eventuales en interinos, a ninguna de las partes le interesa perder su influencia en los sistemas de nombramiento, pues al no haber ningún orden establecido en la adjudicación de los mismos, éstos pueden decidir de forma totalmente arbitraria, primero, a qué trabajadores se les hace un nombramiento eventual, para a continuación tener la posibilidad de ser nombrados interinos, dejando fuera a otros que aun teniendo más antigüedad o méritos, no serán nombrados interinos por tener otro tipo de nombramiento ( sustitución de larga duración, servicio especial en activo, cobertura de liberación sindical etc.'
Fuente: Comunicado de MATS de 22/11/2016 recibido en APISCAMEn este sentido han tenido gran influencia los Acuerdos de bolsas de contratación firmados por la Administración y la mayoría de los sindicatos a partir de 2005, pero también los Pactos anteriores, donde se regulaba por cada centro la contratación temporal, permitiendo en algunos casos la exclusión de la bolsa por motivos totalmente arbitrarios (decisión unilateral de un jefe, discrepancias con la forma de realizar la actividad, caer en situación de incapacidad temporal o simplemente no estar a la altura del rendimiento deseado sin especificar motivo alguno). De esta manera el trabajador ha sido sometido a una presión permanente que obstaculiza enormemente su actividad profesional.
Ya no digamos nada de los centros donde ni siquiera han existido bolsas de contratación, permitiendo a los responsables de la selección de los trabajadores, actuar con total arbitrariedad en la incorporación de los mismos (amiguismo, clientelismo u otros procedimientos subjetivos).
Pero aún incluso en los sistemas de selección más regulados la Administración se mueve en un auténtico caos (bolsas centralizadas para algunas categorías, bolsas preferentes para otras procedentes de procesos selectivos, bolsas para funcionarios, para laborales, etc.).
Tratando de remediar este caos en Febrero de 2016 se firmó por la Administración y los Sindicatos de la Mesa Sectorial un Acuerdo de selección temporal, que debería estar ya en funcionamiento desde Octubre, pero una vez más, ni Administración ni sindicatos han cumplido con sus compromisos.
Todo esto puede tener una explicación como casi siempre siniestra. Tras el anuncio hecho por la Mesa Sectorial de convertir entre Noviembre y Diciembre a 5.000 trabajadores eventuales en interinos, a ninguna de las partes le interesa perder su influencia en los sistemas de nombramiento, pues al no haber ningún orden establecido en la adjudicación de los mismos, éstos pueden decidir de forma totalmente arbitraria, primero, a qué trabajadores se les hace un nombramiento eventual, para a continuación tener la posibilidad de ser nombrados interinos, dejando fuera a otros que aun teniendo más antigüedad o méritos, no serán nombrados interinos por tener otro tipo de nombramiento ( sustitución de larga duración, servicio especial en activo, cobertura de liberación sindical etc.'
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