viernes, 20 de junio de 2008

Madrid. Informatización congénita y adquirida

'Los nuevos hospitales nacen con la informatización bajo el brazo, pero ésta no surge por inspiración divina. Su gestación es larga y laboriosa, quizás no tanto como en un hospital ya existente, pero no por ello hay que restarles mérito. En el caso de Madrid han sido sextillizos, ya que en algo más de tres semanas nacieron seis hospitales. Pese a que, como es lógico, hubo un trabajo previo, en esos días de febrero hubo de ensamblarse todo de tal manera que no quedara ningún problema.

De ello da fe José Antonio Rodríguez Maniega, director del Proyecto Hospitales de Madrid de Siemens Healthcare: "Conseguir un sistema integrado era lo esencial. Suele ser un punto débil, pero una vez pasados los ajustes iniciales todo ha ido bien", ha explicado durante el IV Encuentro Hospital Digital, organizado en Madrid por Expansión Conferencias, con la colaboración de Diario Médico y el patrocinio de Siemens.

Zaida Sampedro, directora general de Sistemas de Información Sanitaria de la Consejería de Sanidad de Madrid, secunda a Rodríguez Maniega: "Ha sido una grata sorpresa que desde la apertura hasta ahora no se hayan detectado problemas de adaptación a las herramientas informáticas".

Como no podía de ser de otra manera, la construcción de los seis centros en la Comunidad de Madrid se hizo sin dar la espalda a la informatización, y por ello "se ha seguido el modelo de hospital sin papeles y sin cables", afirma Sampedro. La razón por la que se ha seguido este modelo es, según ella, que se obtiene una mejora de la calidad de los servicios sanitarios y de la accesibilidad de la información mediante la gestión eficaz de los datos soportada en la historia clínica electrónica.

Además, "se consigue una eficiencia en los procesos de trabajo gracias a la homogeneización, con un modelo único e integrado de información para todos los centros. Si no existe esa homogeneización, gestionamos un caos", apunta Sampedro. En la misma línea, en ese proceso centralizado se trabaja en reducir la variabilidad en la definición de parámetros y la nomenclatura de los sistemas, pero todo sin olvidar las características específicas de cada centro, ya que la variabilidad no desaparece totalmente.

Otro de los aspectos clave para Sampedro son las unidades centralizadas: la Unidad Central de Radiodiagnóstico (ver DM del 18-I-2008) y el laboratorio, que han nacido en medio de la polémica (ver DM del 09-I-2008). No obstante, la directora general tiene motivos para defender esta centralización: "El cambio del modelo tradicional a éste ha permitido mantener el mismo nivel de eficacia y eficiencia con menos radiólogos". Rodríguez Maniega ha apoyado esta idea: "Se trata del fin de la ecuación tamaño=calidad".

El modelo de los nuevos hospitales se ha basado en el seguido en el Hospital de Fuenlabrada, que fue pionero en la eliminación del papel, y en la Fundación Hospital de Alcorcón. El resultado ha sido "un sistema de información clínico integrado, que está centrado en el paciente, con el pensamiento de que errar a veces no es humano, y en el profesional, dando respuesta a sus nuevas inquietudes", subraya el director de Proyecto Hospitales de Madrid.

En cualquier caso, dicho sistema "no debe ser un obstáculo ni para los profesionales, que saben lo que hacen, ni para los pacientes, que saben lo que piden, ni para los gestores, que saben lo que necesitan", y tiene que responder a las expectativas del mercado, puesto que "hay muchos ojos observando por tratarse de un modelo atrevido y visionario".

El resultado es claro: "Si la tecnología se integra y se adapta al flujo de trabajo, será invisible. Hace años en las salas de cine había dos espectáculos. Uno estaba en la pantalla y otro en el propio cinematógrafo. Con el avance del séptimo arte la importancia permaneció sólo en la pantalla", explica Rodríguez Maniega. Lo que se intenta con la informatización es que sólo se vean las ventajas, que son muchas, y que las aplicaciones queden en la sombra.

Por tanto, hay que adaptar los modelos a la nueva realidad, y ésta sostiene un cambio tecnológico que se ha demostrado en pocos años: "Mientras que en cinco años se consiguieron dos hospitales sin papeles, con un trabajo de al menos seis meses sólo para la implantación del sistema, en los últimos dos años se han conseguido siete centros, necesitando sólo dos meses para implantar la aplicación en seis de los hospitales", remarca Rodríguez Maniega.'

Fuente y noticia completa: Diario Médico 18/06/2008

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