La Consejería de Sanidad anuncia la Gerencia única y la disolución de la estructura de las áreas

'Desmintiendo los triunfalismos de los sindicatos institucionales que defendían que las "concentraciones" llevadas a cabo en algunos hospitales habían logrado parar los planes privatizadores, la Consejería ha anunciado, justo en el momento que menos debate puede crear en los centros de salud (Navidad), la disolución de la estructura de áreas y la creación de un área única de AP para todo Madrid, con "gerencias funcionales que se dedicarán al día a día".

A este paso, seguirá probablemente la cesión de los EAPs a los hospitales de su zona y la firma de contratos con los propios centros, ofreciendo mayores incentivos económicos al personal facultativo, para lograr una reducción del gasto sanitario (tanto en plantillas, como en el producido por los pacientes)

Al mismo tiempo la Consejería afirma que no hay dinero para sanidad (aunque sí lo hay para reflotar los negocios especulativos de la banca) y anuncia que "habrá cambios en el papel de la enfermería", ya que "son competentes para hacer muchas labores y deberían hacer cada vez más". Eso sí, sin ninguna garantía de incrementar su número, y ocultando que tenemos una
de las ratios más bajas de la Unión Europea: 1 enfermer@ por cada 1,23 médicos.

Esta medida, unida al anuncio de que a partir del próximo 1 de enero el Centro de Especialidades Periféricas de Argüelles (Quintana) pasa a ser explotado por Capio SA, y posiblemente también lo sea el de Salud Mental de Centro (Lavapies), indica el interés de la Consejería por acelerar el proceso de privatización en fechas en la que la opinión pública está menos alerta.

El desmantelamiento de la atención primaria sólo tiene sentido dentro del proceso general de privatización de la sanidad, proceso que nos afectará como trabajadores y como pacientes, por lo que todas aquellas medidas que no ofrezcan alternativas reales de lucha conjuntamente con los usuarios (las únicas que pueden permitir frenar la privatización sanitaria), van dirigidas a lavar la cara de los sindicatos institucionales y sus satélites que, conociendo la gravedad de los hechos, se dedican a dar una falsa imagen de lucha, mediante convocatorias en las que reivindican "mejoras económicas y profesionales".'

Fuente: Comunicado de SAS Madrid recibido en correo de APISCAM y Documento en Web de SAS Madrid