'Bajo el lema 'Salud 2.0 y mSalud. Seguridad y confidencialidad de la
información sanitaria en la sociedad conectada', la SEIS analizó los
riesgos de seguridad de las nuevas TIC.'
'Los datos de carácter sanitario tienen el máximo nivel de protección,
según la normativa vigente, y llevar esa protección a los dispositivos
móviles no será tarea fácil: "El entorno de los smartphones es
esencialmente inseguro, ya que hay muy poca estanqueidad entre
aplicaciones; la mayoría se comunican entre ellas, compartiendo
información, y no queda claro cómo se pueden cerrar", según ha
explicado a Diario Médico Ramón Miralles, coordinador de Auditoría y
Seguridad de la Información de la Autoridad Catalana de Protección de
Datos.
Miralles, que moderó una mesa sobre Los riesgos específicos de la utilización de los dispositivos y aplicaciones móviles en el ámbito sanitario
durante el XI Foro de Seguridad y Protección de Datos de Salud,
organizado por la Sociedad Española de Informática de la Salud (SEIS) la
pasada semana en Pamplona, reconoce que "el uso de dispositivos móviles
y app en el ámbito de la salud está empezando, no es un ámbito
que aún hierva, pero ya está muy caliente. Por el momento, las
aplicaciones que se usan están poco comprometidas con los datos de
salud, pero pronto se avanzará en ese sentido".
No obstante, "aunque se están empezando a tener en
cuenta las cuestiones de seguridad, no son lo primero, se piensa antes
en la funcionalidad", dos factores que, a juicio de Miralles, "deberían
desarrollarse en paralelo".'
'Otro punto importante en
el futuro del desarrollo de las aplicaciones es "la dificultad de saber
si son confiables o no". A este respecto, en la mesa redonda se citaron
iniciativas como Appsaludable, la garantía de calidad de apps que ha puesto en marcha la Agencia de Calidad Sanitaria de la Consejería de Salud y Bienestar Social de Andalucía,
iniciativas que, a juicio de Miralles, deberían servir para "minimizar
la sorpresa en lo que a protección de la privacidad se refiere".
El uso de dispositivos móviles está cobrando relevancia en una de las
tendencias más sobresalientes en atención sanitaria moderna: la
atención domiciliaria. Durante el foro de la SEIS se presentaron
proyectos como Telbil, un servicio de "telemonitorización de
pacientes crónicos dependientes, principalmente con bronquitis crónica e
insuficiencia cardiaca, un 50 por ciento de ellos con ambas afecciones,
y con varios episodios de ingreso hospitalario en el año anterior",
según explicó Iñaki Martín, médico de Familia responsable del proyecto.
El seguimiento de los pacientes se realiza enviando
datos de pulsioximetría, frecuencia respiratoria, peso y tensión
arterial mediante un smartphone a "una plataforma accesible
desde el centro de salud y el hospital". Para garantizar la seguridad de
la información, Martín explica que "se siguen los estándares necesarios
y se realizan auditorías periódicas de protección de datos. Toda la
información del paciente viaja de forma anónima y encriptada,
identificable solamente mediante un código asignado a cada usuario, y se
garantiza que sólo tienen acceso a esa información el médico y la
enfermera de primaria, las enfermeras de enlace y los médicos del
hospital".'
Fuente y noticia completa: Diario Médico 24/02/2014
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