'La Comisión Europea ha publicado hoy el cuadro de indicadores de la justicia en la UE de 2024, que ofrece un análisis comparativo de la calidad, la independencia y la eficiencia de los sistemas judiciales de los Estados miembros de la UE. Esta es ya la duodécima edición y ofrece un panorama general a largo plazo de la manera en que ha evolucionado la situación en los Estados miembros en los tres aspectos que caracterizan una justicia eficaz, esto es, eficiencia, calidad e independencia.
¿Qué es el cuadro de indicadores de la justicia en la UE?
El cuadro de indicadores de la justicia en la UE es una herramienta de información comparativa destinada a ayudar a la UE y a los Estados miembros a mejorar la eficacia de los sistemas judiciales nacionales. Para ello, ofrece datos sobre la eficiencia, la calidad y la independencia de los sistemas judiciales de todos los Estados miembros. Es uno de los instrumentos del conjunto de herramientas de la Unión al servicio del Estado de Derecho que utiliza la Comisión para supervisar las reformas judiciales emprendidas por los Estados miembros.
El cuadro contribuye a determinar las mejoras prácticas y las posibles carencias. También indica las tendencias en el funcionamiento de los sistemas judiciales nacionales a lo largo del tiempo. No presenta una clasificación general única, sino un panorama global del funcionamiento de los sistemas judiciales, basado en varios indicadores de interés común para todos los Estados miembros.
El cuadro de indicadores no promueve ningún tipo concreto de sistema judicial y trata a todos los Estados miembros en pie de igualdad. Con independencia del modelo de sistema judicial nacional o de la tradición jurídica en que se fundamente, la diligencia, la independencia, la asequibilidad y la facilidad de acceso son algunas de las características esenciales de un sistema judicial eficaz.
¿Por qué son importantes los sistemas judiciales nacionales para la UE?
Unos sistemas judiciales eficaces son esenciales a la hora de aplicar y hacer cumplir el Derecho de la UE y de defender el Estado de Derecho y otros valores en los que se funda la UE y que comparten los Estados miembros. Garantizan que las personas y las empresas puedan disfrutar plenamente de sus derechos, refuerzan la confianza mutua y contribuyen a crear un entorno favorable a las empresas y las inversiones en el mercado único. Contar con sistemas judiciales eficaces es fundamental para la aplicación del Derecho de la UE, ya que los órganos jurisdiccionales nacionales actúan como tribunales de la UE a la hora de aplicar ese Derecho.